Verifica la cantidad de tinta del cartucho. Algunas impresoras vienen con una alerta de nivel bajo de tinta, algunas impresoras antiguas no. El nivel bajo de tinta puede estar provocando las impresiones borrosas o no claras. Si no conoces el nivel de tinta de tu impresora, intenta recargar el cartucho con tinta fresca.
Si esto no funciona, retira el cartucho de la impresora y verifica que nada obstruya la salida de la tinta. Es común encontrar pelusas, pedazos de papel, etc.
Verifica que la tinta no se haya secado dentro del cabezal. Si no has utilizado la impresora por algún tiempo o bien vives en un lugar muy seco, es probable que la tinta del cabezal se haya secado e impida que la impresora funcione correctamente. Toma un pedazo de algodón que y empápalo con un poco de alcohol. Toma este algodón y ligeramente limpia el cabezal del cartucho. Repite este proceso tres veces con intervalos de tres minutos.
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